No puede existir iniciativa si tienes miedo, y el miedo te obliga a aferrarte a la tradición , los gurús, etc.
La iniciativa nace de la libertad. Es el impulso natural de crear, descubrir, actuar desde uno mismo. Pero cuando hay miedo —a equivocarse, a ser juzgado, a no encajar—, ese impulso se reprime. Entonces, en lugar de explorar tu propio camino, te refugias en caminos ya hechos: tradiciones rígidas, ideas heredadas, o figuras de autoridad.
Bruce Lee vivió esto en carne propia. Él comenzó dentro de un sistema tradicional (el Wing Chun), pero tuvo el coraje de romper con los límites de la tradición, cuestionar a sus maestros, y crear su propio arte: el Jeet Kune Do. Y no lo hizo desde la arrogancia, sino desde una confianza sin miedo.
«El miedo te hace buscar refugios externos.
La iniciativa verdadera surge cuando confías en tu propia visión.»
– Bruce Lee
Para Bruce, seguir ciegamente a un gurú o repetir fórmulas sin cuestionar era una forma de estancamiento. No hay crecimiento si solo imitamos. La iniciativa requiere valentía: pensar por uno mismo, actuar con autenticidad y desapegarse del miedo a fallar.
